Interfaz cerebro-ordenador inalámbrico
Unos investigadores han estado trabajando durante años hacia el objetivo de lograr una tecnología que pueda algún día ayudar a las personas con parálisis a recuperar el uso de sus extremidades, y permitir a las personas con amputaciones usar sus pensamientos para controlar las prótesis e interactuar con ordenadores de ayuda, sin tener que depender de los cables. El objetivo se centra ahora en mejorar una interfaz cerebro-ordenador, un dispositivo implantado bajo el cráneo en la superficie del cerebro de un paciente. Este implante conecta el sistema nervioso humano a un dispositivo electrónico que puede, por ejemplo, ayudar a restaurar algún control motor en una persona con una lesión en la médula espinal, o a alguien con una enfermedad neurológica como por ejemplo la esclerosis lateral amiotrófica, también llamada enfermedad de Lou Gehrig. Los neurocientíficos del equipo identificaron las señales neurales específicas necesarias para controlar un dispositivo protésico, como un brazo robótico o el cursor de un ordenador. Los ingenieros del equipo diseñaron entonces los circuitos que permitirían que una futura interfaz inalámbrica cerebro-ordenador procesara y transmitiera estas señales cuidadosamente identificadas y aisladas, usando menos energía y haciendo así seguro el implante del dispositivo en la superficie del cerebro. Para probar su idea, los investigadores recogieron datos neuronales de tres primates no humanos y de un humano participante en un ensayo clínico (BrainGate).
Fuente: NCYT