F1: Triunfo e historia pura para Checo
La coronación de una década de esfuerzos, altas, bajas, alegrías y sinsabores para Sergio Pérez no pudo haber sido de otra manera: entre lágrimas.
Llorar no siempre va de la mano con una pérdida o un dolor inconmesurable. También acompañan a las alegrías más grandes, como ocurrió ayer con el piloto tapatío, quien después de 190 carreras en la Fórmula Uno por fin pudo subirse a lo más alto de un podio.
Por primera vez en 50 años, los acordes del Himno Nacional Mexicano sonaron al término de un evento de Fórmula Uno, luego de que Pérez consiguiera el triunfo en el Gran Premio de Sakhir, el penúltimo de la temporada.
“Trabajé toda mi vida para vivir momentos como estos”, confesó el jalisciense después de dejar salir unas lágrimas al cruzar la meta y al escuchar el Himno en Bahréin.
Segundo piloto mexicano en ganar un GP de Fórmula Uno, después de Pedro Rodríguez (dos triunfos, el último en 1970), Pérez, quien aún no sabe si contará con un volante en la máxima categoría del automovilismo el año que viene, reconoce que le harán falta “varios días” para ser plenamente consciente de lo logrado.
El tapatío de 30 años, quinto en la parrilla de salida, confesó que su ambición al inicio de la carrera en Bahréin era quedar entre los tres primeros.
Fuente: el informador